Esta es la razón por la que el experto en salud pública e investigador de la Fundación para el Fomento de la Investigación Sanitaria y Biomédica de la Comunitat Valenciana (@GVAfisabio), Salvador Peiró, piensa que han aumentado los casos en residencias en las últimas semanas.
Así, la combinación de una menor protección de las vacunas con delta, el desconfinamiento de las residencias y la multiplicación de los contagios podrían ser las posibles causantes de este aumento de infecciones ya que, por ahora, no se ha podido demostrar que las dosis inyectadas a los mayores hayan perdido realmente eficacia en estos siete meses, al menos, en la prevención de casos graves o fallecimientos –que, aunque hayan aumentado, siguen siendo pocos proporcionalmente, frente a los meses anteriores a la campaña de vacunación–.
Fuente: Imserso.
La principal causa: el aumento de la transmisión
"Las vacunas dan bastante protección respecto a daño grave, hospitalización y muerte. Y algo más baja, en relación con la Covid leve o sintomática. Ya lo sabíamos. Y con mucha transmisión, el virus acaba llegando a cualquier parte. Especialmente, en centros en los que conviven personas y donde hay trabajadores y familias que entran y salen. Porque la forma de detener la transmisión es no tener contactos y esta gente los tiene con personas que a su vez los tienen fuera", explica el epidemiólogo.
Asimismo, sostiene, la transmisión en residencias con gran parte de su población vacunada no es algo nuevo. "Se vienen viendo situaciones en las que una persona iba a hacerse una intervención programada en el hospital y, al realizarse una PCR, estando vacunado, daba positivo. Luego, ibas allí y casi todos también se habían infectado. Y ahora, seguimos teniendo estos casos, aunque la mayoría son leves o asintomáticos", comenta.
Por ello, argumenta, "si hay mucha transmisión entre jóvenes, llegará también al resto de población, porque no están aislados del mundo".
La variante delta explica el crecimiento explosivo
Y la variante delta está ayudando a esta expansión del virus, prosigue. "En espacios donde la gente convive, con esta variante, que es extraordinariamente transmisible, cuando hay contagios, se lo pillan casi todos. Es lo que estamos viendo ahora. Los brotes están siendo más grandes. Si antes en una casa se detectaba un caso y se infectaban el 10%, ahora, son casi el 40% o el 50%", apunta.
"Y es porque tiene más carga viral y, en menos tiempo de exposición, se transmite. Por tanto, si entra delta en una residencia donde secome en comedores, se comparten espacios interiores, etc. –igual que en los colegios mayores, prisiones...–, se acaban contagiando prácticamente todos, si no pueden estar aislados", señala.
"Las vacunas previenen bastante la transmisión, pero con delta no tanto como antes. Si en los primeros estudios de Israel hablaban de Pfizer de que protegía un 80%, ahora, lo han rebajado al 60%. Eso sí, respecto a hospitalización, la protección es muy alta, de 85% o 90%", indica Peiró.
Con todo, sostiene, a parte de la mayor o menor efectividad de la vacuna, también entraría en juego, para que se infecten más o menos personas con doble pauta, "la exposición y la carga viral". "Y esto depende que sea al aire libre, en interior, de cuánto tiempo estuviste, de cómo, si estabas de lado o de espaldas, etc. Pero vamos, en un entorno cerrado, tal y como funciona esta variante y por aerosoles, lo normal, es que se infecte la mayoría", advierte.
El desconfinamiento de las residencias, otra razón del aumento de casos
Además, añade, otro factor que está siendo influyente en el aumento de casos es que se ha dejado de aplicar una "política de sellado" de los centros. "Si entra un trabajador, que suele exponerse más, o un familiar, lo normal es que casi todos acaben infectados", anticipa Peiró.
Es más, aunque es importante que todos los trabajadores estén vacunados, para reducir los riesgos, tampoco esto es garantía de absoluta seguridad ya que los que han recibido la doble pauta pueden traer también el virus al centro sin los controles adecuados y con gran incidencia en la sociedad.
"Un trabajador no es distinto a las personas que están dentro e, incluso vacunado, puede contagiarse e infectar. Y tiene más probabilidad de hacerlo si hace mucha más vida social que los otros y si tiene más contactos fuera. Y es que delta es más trasmisible. Lo ves, por ejemplo, en que hay bares que han cerrado, porque toda la plantilla se ha contagiado. Y, por ejemplo, en el caso de las residencias, pasa, entre otros trabajadores, con el personal de la limpieza, que muchas veces son de una misma empresa pero trabajan en varios centros. Y en ese caso, es complicado el control, porque no depende de la residencia sino de la contrata. Aun así, hay que hacer un esfuerzo", pide el epidemiólogo.
La vacuna no parece haber perdido mucha eficacia para prevenir muertes y hospitalizaciones
Finalmente, Salvador Peiró entiende que estos casos no parece que se estén debiendo a una pérdida de eficacia de la vacuna con el tiempo. Al menos, se está viendo que sigue protegiendo de casos graves y fallecimiento.
"Este fenómeno, por ahora, no lo hemos observado. Hemos hecho varios trabajos al respecto. En concreto, tenemos uno en marcha en el que seguimos la inmunidad de los residentes, asumiendo que, en los mayores más frágiles, podría deteriorarse. Sin embargo, de momento, aguanta muy bien. Hay sólo un 0,5% de personas que no generaron defensas, cifras, que corresponden casi a la población general", argumenta.
A pesar de todo, es cierto, matiza, que no es lo mismo estar vacunado con 80 años que con 20. "Yo siempre pongo el simil que estarlo con esas edades y coger la Covid puede ser similar, aunque no del todo, a infectarse teniendo 20 años sin protección, en cuanto a probabilidades de tener un cuadro grave", concluye.
Sobre el autor:
Pablo Recio
Pablo Recio es periodista especializado en salud y dependencia, es graduado en Relaciones Internacionales por la Universidad Complutense de Madrid y comenzó su carrera profesional en el diario El Mundo cubriendo información cultural y económica.
Además, fue cofundador de la radio online Irradiando y cuenta con un máster en Gobernanza y Derechos Humanos por la Universidad Autónoma de Madrid y otro en Periodismo por el CEU San Pablo/Unidad Editorial.