65ymás
Facua-Consumidores en acción (@facua) ha detectado diferencias de hasta un 167% en las tarifas de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) obligatoria para los turismos con motor de gasolina y de un 95,5% en los vehículos diésel, en función de la comunidad autónoma.
El precio medio de la ITV en las diecisiete comunidades autónomas en la actualidad es de 34,52 euros para los turismos de gasolina y de 41,23 euros para los equipados con motor diésel, según Facua.
El análisis de las tarifas señala que Euskadi es la comunidad autónoma más cara para turismos de gasolina, 45,38 euros. Le siguen Cantabria, con 42 euros, y la Comunidad de Madrid, que fijan las tarifas sin regulación autonómica, con 41,72 euros.
Sin embargo, las tarifas más económicas en gasolina corresponden a Mallorca, 17 euros; Murcia con 22,3 euros, y Andalucía (26,19 euros para los vehículos de menos de 1.600 centímetros cúbicos y 35,4 euros en el resto).
En cuanto a las tarifas de las ITV para turismos diésel, la Comunidad de Madrid es la más cara, 56,04 euros de media. Le siguen los 48,26 de Murcia y Galicia, con 47,72 euros.
Las tarifas más bajas para las ITV de los turismos diésel, son las de las estaciones públicas de Extremadura (28,67 euros), Navarra (29,4 euros) y las de Andalucía para turismos de menos de 1.600 centímetro cúbicos. (30,79 euros).
Diferencias en explotación y tarifas
En la mayor parte de las comunidades autónomas existe el régimen de concesión pública para la explotación de las estaciones de ITV, salvo en Madrid, donde son privadas, y algunas otras en las que las explota directamente la administración autonómica a través de empresas públicas. Es el caso de Andalucía (Veiasa), Asturias (Itvasa) o la Comunidad Valenciana (Ivace).
En la Región de Murcia y en Extremadura conviven algunas estaciones de carácter público con otras privadas. En Mallorca, que ha cambiado su modelo este año, lo gestiona directamente el Consell Insular a través de una empresa privada.
Andalucía es, por otro lado, la comunidad autónoma que ofrece un sistema tarifario más complejo. En este sentido, hace una distinción de los vehículos no sólo en función de si son de gasolina o diésel, sino de su cilindrada.
En el extremo opuesto se encuentra Extremadura, donde existe una única tarifa para todos los vehículos, con independencia de su cilindrada y de si son de gasolina o diésel.