Toni Esteve
Sociedad
Cómo prevenir que duchas, fuentes y sistemas de riego propaguen la legionela
Con la subida de las temperaturas estas instalaciones de agua pueden propagarla
La bacteria Legionella pneumophila vive en el medio acuático y es la responsable de la legionelosis o enfermedad del legionario, una infección que provocada por la inhalación de aerosoles contaminantes. Es al respirar e inhalar esas microscópicas gotas de agua, cuando se introduce en el organismo a través de las vías respiratorias. Según la Organización Mundial de la Salud, entre un 75% y un 80% de los casos notificados de este trastorno corresponden a mayores de 50 años, y entre el 60% y el 70% de los afectados son hombres. Esta infección puede ser leve, pero en casos graves puede llegar a causar la muerte.
La forma de transmisión más habitual es por medio del agua, ya que este microorganismo y otros afines se encuentran en ríos, lagos, arroyos, etcétera. Sin embargo, según el departamento de Salud de la Generalitat de Cataluña (@salutcat) desde el medio acuático puede entrar en instalaciones que utilizan agua para su funcionamiento, como duchas, bañeras de hidromasaje, sistemas de riego por aspersión, fuentes ornamentales, equipos de limpieza viaria o nebulizadores de terrazas, entre otros, y si no se toman las medidas de mantenimiento adecuados pueden convertirse en focos de infección. Además, la subida de temperaturas ambientales favorece el crecimiento de la legionela. De hecho, según la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (@SEIMC_), aunque siempre relacionemos la legionela con las torres de refrigeración, en realidad, la legionela puede encontrarse en cualquier lugar donde se den las condiciones idóneas para su desarrollo.
Afecta más a los mayores
El riesgo de contraer legionelosis depende de la intensidad de la exposición y del estado de salud de la persona, pero suele afectar adultos y personas mayores. Según el departamento de Salud de la Generalitat de Cataluña, entre los factores de riesgo se encuentran “fumar, sufrir una enfermedad pulmonar crónica y tener más de cincuenta años o un sistema inmunológico débil debido a enfermedades como el cáncer, la diabetes o la insuficiencia renal son algunos de los factores que multiplican las posibilidades de desarrollar la enfermedad”.
Si no se toman las medidas de mantenimiento adecuadas, todas las instalaciones que utilizan agua mencionadas anteriormente pueden convertirse focos de infección. Como medias de prevención, el departamento de Salud de la Generalitat de Cataluña ha editado unos folletos para evitar riesgos sanitarios tanto en establecimientos turísticos (hoteles, cámpines, balnearios, campos de golf, etc.) como en instalaciones de competencia municipal en los que se recuerda que cuando las instalaciones de agua han sido paradas es obligatorio “hacer una limpieza y desinfección, así como los controles analíticos correspondientes, antes de su puesta en funcionamiento. Una vez estén en marcha, hay que realizar con rigurosidad las actuaciones de prevención y control: revisión, limpiezas, purgas, control de temperatura, turbidez y pH, desinfección y análisis de legionela”.