Mónica Van der
Sociedad
Los principales problemas circulatorios en las personas mayores por el calor
La inflamación en extremidades o la cianosis pueden son algunos de los síntomas de mala circulación
Las altas temperaturas de este verano con las continuas olas de calor que estamos soportando son de lo más molestas; pero a veces no nos damos cuenta de las repercusiones que pueden tener para nuestra salud. La salud cardiovascular de las personas mayores se vuelve más delicada en los meses de verano, por lo que las personas que sufren cardiopatías tendrán que tener un cuidado extra ya que están más expuestas a futuros riesgos.
Con el calor se producen alteraciones en el mecanismo termorregulador que intenta, a través del sudor y la dilatación de los vasos sanguíneos periféricos, que la temperatura corporal disminuya. Además, también se pueden producir mareos, síncopes o golpes de calor derivados de un aumento del estado de deshidratación o el debilitamiento de la tensión arterial", explica el director de Calidad e innovación de Sanitas mayores, David Curto, a Europa Press.
El calor supone la pérdida de líquidos más significativa de todo el año. El peligro para las personas mayores con problemas cardiovasculares radica en que la cantidad de líquido que se encuentra en el torrente circulatorio también se reduce a consecuencia de la pérdida de líquidos; y por ende, el proceso de circulación va más lenta de lo habitual.
Ante esta situación y para evitar males más graves, los médicos y expertos de Sanitas Mayores han decidido comunicar las alteraciones vasculares más comunes para estar alerta y proteger a las personas mayores con problemas cardiovasculares.
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Hinchazón de las extremidades, sobre todo en las zonas de manos y pies
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Aumento significativo de las varices en las piernas
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Frío u hormigueo en las extremidades, lo cual significaría que no esté circulando la sangre
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Sequedad en la piel
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Debilitamiento de piel y uñas
Asimismo, los expertos detallan una serie de recomendaciones para ayudar a las personas mayores a prevenir estos casos y mejorar su circulación durante el verano.
- Dieta sana y equilibrada
- Intentar utilizar solo ropa transpirable y cómoda
- Masajes en las zonas más problemáticas
- Hacer ejercicio de manera continuada
- Duchas alterando la temperatura del agua
- Mantener las piernas elevadas al menos durante media hora al día