Proyecto 'Envejece en tu pueblo’: la lucha de los mayores para evitar la despoblación

No son unos rara avis. Son un grupo de jóvenes que, pese a la idea contraria de muchos de su generación, no quieren irse a vivir a una ciudad y prefieren quedarse en un pueblo. Especialmente si con su acción logran evitar que cada día aumente la cifra de poblaciones que se quedan sin vecinos en nuestro país. 

“Nuestros pueblos se mueren y en ellos es donde encontramos nuestra cultura, patrimonio y biodiversidad”, explican como base de un proyecto, Envejece en tu pueblo, que ha sido galardonado con el premio al emprendimiento social 2018 otorgado por el Gobierno de Aragón a través del Instituto Aragonés de Fomento.

¿En qué consiste esta iniciativa contra la despoblación?

Este grupo de jóvenes forman parte de la asociación Senderos de Teja (@Senderosdeteja) y han impulsado un programa para mantener los pueblos vivos de forma sostenible para favorecer el asentamiento de población y las actividades dirigidas a los habitantes del lugar. Un programa cuyas acciones se llevan a cabo en las localidades de Salvatierra de Esca, Sigüés, Mianos y Artieda.

Precisamente, todos estos pueblos comparten, desgraciadamente, la misma realidad triste presente y futura: núcleos pequeños alejados de cabeceras de comarca y con un alto índice en envejecimiento. Y que, de no ser por este tipo de acciones sociales en las que se implican activamente sus mayores, estarían abocados al abandono en unos años. Acciones que tienen entre sus objetivos:

• Incrementar la autonomía de estas personas, así como ofrecerles pautas para la mejora del control de su propia vida de forma independiente. 
• Fomento de hábitos saludables relacionado con su alimentación, actividad física o higiene. 
• Adecuación de las viviendas a las necesidades de cada persona. 
• Potenciar las relaciones sociales para evitar situaciones de soledad y aislamiento.  

Primera fase

Para lograr estas metas, se desarrolló una primera fase de este proyecto Envejece en tu pueblo que consistió en la realización de un estudio, a finales del pasado año, para evaluar las necesidades de las personas que viven en estos pequeños pueblos. Una vez conocidas, ahora es el momento de implantar medidas de acompañamiento individual en cada caso. 

Además, de forma grupal se realizan talleres diversos para, entre otros objetivos, mejorar la capacidad cognitiva de estas personas mayores, fomentar la socialización o incluso acercarles a las nuevas tecnologías y el mundo digital. 

Pero, sin duda, una de las actividades más aplaudidas es la de los comedores intergeneracionales; una oportunidad única, con una agradable comida como excusa, para compartir un momento de encuentro e intercambio de recuerdos y experiencias del que disfrutan todos los vecinos, con independencia de su edad.