
Un pub irlandés con 155 años de historia busca un nuevo dueño con una condición innegociable
Se trata de mantener la tradición familiar de los McLoughlin

Situado en la isla Achill, en la costa oeste de Irlanda, se encuentra el emblemático pub McLoughlin, que está en la búsqueda de un nuevo propietario. Sin embargo, hay un requisito especial e innegociable para asumir el mando del bar: llevar el apellido McLoughlin.
Este pequeño establecimiento, que ha pertenecido durante 155 años a la misma familia, se encuentra en un punto de inflexión. El dueño actual, Joseph McLoughlin, ha decidido ceder la administración del local tras más de cuatro décadas. Sin embargo, su mayor preocupación es encontrar a alguien que mantenga el vínculo con su linaje. “Buscar un comprador fuera de la familia y ver que mi nombre se pierde en la historia… me rompería el corazón”, expresó. El hombre busca un descendiente de la familia que continúe la tradición del bar.
Una campaña con el respaldo de Heineken
Para encontrar a la persona ideal, Josie y su esposa, Jackie, han lanzado una campaña de alcance internacional con el apoyo de la conocida cervecera Heineken. Según informa Time Out, la iniciativa contempla la difusión de anuncios y la instalación de vallas publicitarias en diferentes ciudades donde haya ciudadanos irlandeses, como Nueva York, Boston, Sídney, Auckland, Buenos Aires y Phan Thiết.
Heineken ha diseñado un paquete especial para facilitar el cambio de propietario del bar. Este incluye asesoramiento financiero, apoyo empresarial y mentoría, con el objetivo de asegurar que el próximo dueño pueda llevar el bar con éxito y mantener su estabilidad.
La búsqueda de un nuevo dueño para el bar McLoughlin se enmarca dentro de un esfuerzo mayor liderado por Heineken, denominado “Por el Amor a los Pubs”. El director de marketing de Heineken Irlanda, Mark Noble, menciona que el proyecto busca revitalizar y proteger los bares tradicionales del país, que son parte fundamental de la cultura irlandesa. “Los pubs en Irlanda son más que simples lugares para disfrutar de una copa; son fragmentos vivos de historia, lugares de risas, canciones y hermandad”, afirmó Noble.
Muchos bares irlandeses se enfrentan un panorama incierto, ya que muchos de ellos luchan contra las dificultades económicas y cambios en los hábitos del consumo. En este contexto, la búsqueda de un nuevo dueño para el pub McLoughlin no solo pretende seguir con el negocio familiar, sino contribuir a la preservación de una tradición del país.