¿Conoces los peligros de conectarse a una red de wifi pública?

La Policía Nacional (@policia) recuerda que al utilizar una red wifi pública no debes introducir nunca claves personales ni datos sensibles, porque los ciberdelincuentes podrían monitorizar tu navegación y obtener así información personal con fines delictivos.

Hoteles, restaurantes, cibercafés, aeropuertos o centros comerciales, cada vez son más los lugares y espacios que ofrecen wifi gratuito a ciudadanos y clientes. Es un servicio extra que viene muy bien cuando estás fuera de casa y necesitas utilizar internet, pero no dispones o no quieres gastar los datos de tu propio dispositivo. Así, la Policía Nacional y la Guardia Civil insisten en que no son redes seguras y que, si no queda más remedio que recurrir a ellas, hay que extremar las precauciones.

Los principales riesgos de la wifi gratis

Conectarse a una red pública sin realizar unas mínimas comprobaciones hoy en día es una temeridad, porque acceder a ella es fácil para cualquier usuario, incluido aquel cuya intención sea apoderarse de todo tipo de información privada.

Como explica la Oficina de Seguridad del Internauta (@osiseguridad), si la conexión a la red se realiza sin contraseña previa, la información generada durante la navegación no estará cifrada y cualquiera que tenga unos conocimientos informáticos mínimos podrá leerla sin mayor dificultad.

Si es una wifi pública, pero su uso requiere una contraseña que tendrá que facilitarte el propietario de la misma, el nivel de seguridad aumenta y comprobarás que en la dirección de cualquier URL aparece un candado. Aun así la seguridad va a depender del sistema utilizado por la red, que puede ser: WPA WPA2 y WEP. Ten en cuenta que este último (WEP) se considera igual de peligroso que una red que no requiera clave de acceso.

El principal peligro del wifi gratis es el robo de nuestros datos con fines ilícitos, desde acceder a nuestras cuentas bancarias, hasta suplantar la personalidad en redes sociales. No es el único, porque las redes públicas son la vía de acceso favorita de los hackers para instalar los distintos tipos de virus que pueden infectar cualquier dispositivo.

Medidas básicas de seguridad

Como primer consejo, también la Guardia Civil (@guardiacivil) advierte de los peligros del uso de conexiones wifi públicas señalando dos gestiones habituales que resultan especialmente arriesgadas. En una red de este tipo nunca debes realizar compras ni operaciones bancarias ya que implican, necesariamente, la introducción de datos sensibles. Tampoco inicies sesión en ningún servicio que requiera usuario y contraseña mientras estés conectado a una red pública.

Acceder a Internet, por ejemplo, en una cafetería para hacer una consulta puntual o leer la prensa, es totalmente viable, pero introducir tus claves de la banca electrónica para llevar a cabo cualquier operación es un riesgo que debes evitar en cualquier caso. Otras sencillas medidas de precaución, que pueden evitar la acción perjudicial de hackers malintencionados, son:

• Confirma que el wifi público al que accedes es realmente la oficial del establecimiento que la ofrece. Fíjate bien en la dirección, algunos ciberdelincuentes utilizan una muy similar y un error al escribir una simple letra o guion puede hacer que caigas directamente en sus redes, nunca mejor dicho.
• Comprueba que el sistema operativo y las aplicaciones que utilizas en tu dispositivo están actualizadas. Además, debes contar con los necesarios antivirus y cortafuegos. Siempre es importante, pero si recurres frecuentemente a redes abiertas es una medida de seguridad esencial.
• Cuidado también con los “mirones” al conectarte en lugares públicos. Si detectas que alguien cercano está observando atentamente tu pantalla, interrumpe la conexión y cierra tu dispositivo.
• Cuando dejes de utilizar la red recuerda eliminar el acceso creado y comprueba que, en ningún caso, has dejado el dispositivo en conexión automática. Elimina cualquier dato de que haya podido quedar memorizado en tu equipo.

Una trampa común en la que no debes caer

El Grupo de Delitos Telemáticos de la Guardia Civil (@GDTGuardiaCivil) recuerda que la navegación segura depende en gran medida de hacer un uso responsable de Internet y de seguir los básicos consejos de seguridad.

Las wifis públicas y gratuitas pueden venirnos bien en un momento determinado, pero debemos ser conscientes de su escaso nivel de protección. Somos nosotros los únicos que podemos facilitar esas contraseñas y claves codiciadas por los delincuentes informáticos. No proporcionarlas en la mejor medida de autoprotección.

La policía también advierte sobre el peligro que implican esas redes abiertas que aparecen como disponibles en nuestros dispositivos con sospechosa facilidad de acceso. Podemos pensar que es una red segura, quizá de algún vecino poco precavido o de un establecimiento cercano. La tentación de aprovechar la circunstancia, ahorrándonos nuestros propios datos y algunos euros, puede hacernos caer en lo que en realidad es una trampa.

En ocasiones esas wifis disponibles son un cebo para que entres confiado, inicies sesión y expongas tus datos. Es lo que se conoce como el “cazador cazado”, un engaño que, por creer en tu buena suerte, puede salirte caro.