Los ciudadanos británicos llevan días preocupados por el estado de salud de la reina Isabel II. La monarca canceló su viaje a Irlanda del Norte por recomendación de los médicos, después, no acudió a la cumbre del clima y se la vio caminar con bastón. A esto se le suma que, recientemente, el Palacio de Buckigham confirmó que pasó una noche ingresada en el hospital King Edward VII de Londres. Por suerte, después de las especulaciones despertadas sobre su salud, sus seguidores se han quedado más tranquilos al ver una fotografía captada recientemente: a sus 95 años, la reina Isabel se ha dejado ver conduciendo su Jaguar por los jardines del castillo de Windsor.
Un pañuelo en la cabeza, gafas de sol y una actitud decidida. Esta imagen ha calmado los temores de que el estado de salud de la soberana fuera grave. Aún así, es sabido que la reina de Reino Unido no está atravesando por su mejor momento tras el fallecimiento de su marido, el príncipe Felipe de Edimburgo.
Sin embargo, parece que la nonagenaria se encuentra mejor de lo esperado tras ver esta fotografía y saber que tiene planes para las próximas navidades. Tal y como informa The Mirror, Isabel II tiene "firme compromiso" de pasar la temporada navideña en familia, rodeada de sus hijos y nietos en su residencia de Sandringham, como "bálsamo" porque este año serán días especialmente duros sin el duque de Edimburgo.
“Su Majestad está ansiosa por recibir a su familia en su casa de Norfolk para las vacaciones de Navidad y hay mucha preparación por hacer a tiempo para acomodar a todos los que han sido invitados", recoge el medio. Desde que era una niña, la monarca ha visitado Sandringham, propiedad de la familia real británica, una mansión especial para ella porque le trae innumerables momentos felices, pero también tristes, ya que fue el lugar donde, en febrero de 1952, falleció su padre Jorge VI. Aún así, después de casi 70 años, sigue siendo la ubicación elegida por la reina para pasar las navidades.
De hecho, el príncipe Guillermo reveló en el documental sobre la vida de Felipe de Edimburgo que "Sandringham siempre ha sido una parte muy, muy importante de su vida", refiriéndose a su abuelo.
Por otro lado, el espíritu joven de la soberana la ha convertido en una de las personas mayores más admiradas del mundo. Incluso, recientemente ha rechazado el premio de la Oldie of the Year (persona mayor del año) entregado por la revista británica The Oldie porque "Su Majestad cree que uno es tan mayor como se sienta, como tal la reina no cree que cumpla con los criterios relevantes para poder aceptar y espera que encuentre un destinatario más digno", explicaba en una carta de su asistente privado, Tom Laing-Baker.