Lidia Lozano
Sociedad
El Retiro da la bienvenida a su árbol más 'anciano': un olivo de 627 años
El más longevo, pero no el más grande
Los jardines del Buen Retiro han incorporado a su espacio un olivo de unos 627 años. De esta forma, ha relevado en longevidad al famoso ahuehuete, cuya edad es algo incierta, pero dicen que está en torno a los 400 años.
'Un Árbol por Europa'
Se ha plantado cerca de la Puerta del Ángel Caído, formando parte de la iniciativa 'Un Árbol por Europa', como "símbolo del compromiso de Madrid con la sostenibilidad". El objetivo del proyecto es que todos los municipios españoles planten al menos un árbol a modo de protesta contra la deforestación en Europa.
El nuevo inquilino pesa cinco toneladas, mide unos tres metros de alto y su tronco tiene un diámetro de aproximadamente tres metros y medio. No es el árbol más grande del parque, pero se ha convertido en el más antiguo. La elección de la especie no es aleatoria, ya que en los planos de 1656 aparecía el Olivar de Atocha, alrededor de la actual Basílica de Atocha. En aquella época, los reyes podían entrar desde El Retiro directamente al olivar y a la Virgen de Atocha.
Los olivos en Madrid
Además, este nuevo olivo no está solo; de hecho, cerca de él se encuentra el olivo más grande del parque. También hay otros en la zona del Antiguo Reservado, en la Montaña Artificial y en los jardines de Cecilio Rodríguez. Esto demuestra que es una especie que aguanta las condiciones del Retiro -es típicamente mediterránea-, donde no hay muchas heladas, a las que los olivos son sensibles.
Más allá de ser el portador del fruto de la oliva, uno de los más importantes para España, destaca su relevancia ornamental y jardinera. Así, hay ejemplares en otras zonas de Madrid procedentes de Martos (Jaén): en la plaza España, en el Palacio de la Moncloa -hay tres desde los años 80- o en la plaza Colón, junto a los motivos de la conmemoración del descubrimiento de América.
Estos árboles no superan los diez metros de altura, aunque son frondosos. Además, son longevos y tienen una gran capacidad de regeneración. Por ello su uso en jardinería está tan extendido, pues es fácil de trasplantar en edad adulta como ejemplar aislado.