Paula Buedo
Sociedad
¿Se puede utilizar la crema solar del año pasado?
El uso de protección solar es recomendado para todo el año, no solo para verano
¿Tienes en el armario un bote de crema solar que empezaste el verano pasado y guardaste para este? Si es tu caso, es posible que te haya entrado la inquietud por si este producto caduca y, de ser así, si pierde su efectividad o puede resultar nocivo para la piel.
Cuando se acerca el calor y los meses de verano, en los que nos exponemos a los rayos de sol con mucha mayor frecuencia, empiezan a surgir las dudas relacionadas con este producto. No obstante, debemos señalar una primera cuestión fundamental: la protección solar no es solo para verano. La mejor forma de aprovechar los botes y no arriesgarse a que pueda estropearse es utilizarla durante todo el año, como los expertos recomiendan.
Pese a todo, la respuesta a la pregunta general es que sí, la crema puede caducar, pero no de un año para otro. Además, su conservación dependerá de cómo y dónde la guardes, así como de si está o no abierta.
Tres años si el bote está cerrado
Si al final del verano calculaste que ibas a necesitar otro bote nuevo, pero finalmente no tuviste que abrirlo, este año conservará toda su eficacia. La Administración de Alimentos y Medicamentos exige que todos los protectores solares mantengan su potencia original intacta durante tres años como mínimo.
Si, por el contrario, la guardaste abierta, no te preocupes: es probable que siga funcionando. En este caso, dependerá de las condiciones en las que se haya conservado. Lo ideal es hacerlo en un cajón o armario protegido de la luz, que sea fresco y seco —por lo que la humedad del baño no es ideal—, y con temperatura estable alrededor de los 22 grados.
No obstante, si lo abres y notas que su olor, color o textura es raro, mejor tíralo y compra una crema nueva. Podrías irritar tu piel o quemarte si ha perdido su capacidad de proteger de los rayos del sol.
Otras dudas sobre el protector solar
Además de su caducidad, hay otras dudas que se repiten todos los años por estas fechas. En primer lugar, no parece quedar del todo claro qué significa el número que todos llevan asignado. ¿Qué diferencia hay entre una crema con 15 FPS o 50+?
FPS corresponde a las siglas de Factor de Protección Solar, que hace referencia al número por el que se multiplica el tiempo que protege a la piel. Es decir, si tardas 10 minutos en quemarte, una crema de 30 FPS hará que se multiplique por 30 el tiempo. A mayor FPS, más tiempo estarás protegido, aunque eso no implica que no haya que renovar la aplicación.
Sin embargo, existen muchos factores que reducen el tiempo de eficacia: sudor, agua, roce con la ropa… Por ese motivo, es imprescindible volver a aplicar la crema cada dos horas, aproximadamente, y siempre que salgamos del agua en playas y piscinas.