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La hipersensibilidad dental se caracteriza por fuertes molestias al ingerir alguna comida o bebida dulce, ácida, caliente o fría. La principal causa de este problema es el desgaste del esmalte dental, que deja la dentina más expuesta. Es muy común que esta dolencia aumente en primavera y verano debido al consumo de alimentos y bebidas más frías.
Dos de cada tres españoles de 24 a 60 años tienen actualmente algún problema bucodental (65,85%). De ellos, 3 de cada 10 tienen dientes sensibles (28,96%), según datos Estudio de Salud Bucodental de Sanitas 2023.
La dentina es el tejido del diente situado bajo el esmalte, la capa más externa del diente. Este tejido contiene unos tubos microscópicos (túbulos dentinarios) que llegan al interior del diente, lo que se conoce como pulpa dental, que es donde se encuentra el nervio. Los estímulos muy fríos o muy calientes pueden llegar hasta el nervio a través de estos tubos, irritándolo y generando la sensación de molestia por hipersensibilidad.
Ante esta situación, Sanitas recomienda seguir una serie de pautas para evitar esta molestia. Son las siguientes.
- Seguir una rutina de higiene rigurosa: utilizar hilo o seda dental, además del cepillado habitual. Usar una pasta y colutorio específico, normalmente con flúor, para dientes sensibles. Es importante, además, no cepillarse de manera agresiva.
- Establecer unos buenos hábitos alimenticios, como reducir el consumo de comidas y bebidas ácidas.
- Corregir las malas costumbres que pueden desgastar el esmalte de los dientes, como utilizarlos para morder envases, fumar o beber en exceso, o utilizar palillos de madera.
- Visitar al odontólogo en caso de que la hipersensibilidad no remita o empeore. Lo mejor es que un especialista revise nuestro caso y determine qué es lo que causa la sensibilidad dental, y nos proporcione el tratamiento adecuado.