Las propinas están de capa caída. El auge de los pagos a través del móvil y de la tarjeta para prescindir del metálico y evitar así contactos, establecido durante los meses más duros de la pandemia, pero que sigue vigente, está acabando con ellas.
Desde el sector de la hostelería aseguran que las propinas, esa pequeña gratificación por un buen servicio, han caído a la mitad con la desaparición del dinero en efectivo. La pandemia del coronavirus ha hecho que hasta en las consumiciones más pequeñas, como un café o dos cervezas, se prescinda del dinero suelto para evitar contactos. Y parece que la tendencia de pagar a través del móvil o con la tarjeta de crédito ha llegado para quedarse. Seis de cada diez pagos en hostelería se realizan por estos medios, y un buen número de los consumidores confiesa que ni siquiera lleva metálico encima.
Las dudas de dejar propina con tarjeta
Hasta ahora, no era costumbre dejar propina en el pago con tarjeta. De hecho, aunque se pagará una cuenta con tarjeta, la propina se dejaba en metálico. Pero la pandemia lo ha cambiado todo.
Existen establecimientos que no aceptan el pago de propinas por medios digitales, pero otros comienzan a explorar esta fórmula, permitiendo, por ejemplo, redondear la cuenta en el propio datafono. Algunas aplicaciones de reparto ya llevan integrada una función para dejar propina a la persona que nos ha atendido. Deliveroo puso el año pasado en marcha un sistema de propinas para ayudar a la hostería. Es el cliente quien puede redondear su cuenta o seleccionar la cantidad que quiere dejar al restaurante que ha preparado su comida. También han surgido aplicaciones con las que dejar propinas, como Tipper.
Pero a muchos clientes les asalta la duda: ¿llegarán las propinas realmente al servicio, o se incorporarán a la cuenta de resultados del restaurante? La duda es más que razonable, de hecho, recientemente saltó el escándalo de que Amazon se quedó con 61,7 millones de dólares (más de 51 millones de euros) en propinas que los clientes habían decidido abonar a los repartidores de la empresa. Según nos cuentan desde el propio sector, que de verdad lleguen a su destino depende de la buena voluntad de los gestores une vez que hagan la contabilidad.
¡Ojo! las propinas deben tributar en el IRPF
Para quien si quedan registradas esas propinas pagadas a través del móvil o de la tarjeta, es para Hacienda. La respuesta a una consulta vinculante de la Dirección General de Tributos trascendió públicamente hace unos años levantando un gran revuelo público. Este departamento del Ministerio de Hacienda entiende que, aplicando el artículo 17.1 de la Ley 35/2006 del IRPF, las cantidades percibidas en concepto de propinas que recibe el trabajador son rendimientos del trabajo y están sujetas a tal impuesto y, por tanto, a su sistema de retenciones a cuenta.
La empresa debe retener e ingresar en cuenta de sus trabajadores el importe de la propina. De esta manera, tributaría por el IRPF. Eso sí, las propinas no deben tributar bajo el IVA o el Impuestos de Sociedades, solo bajo el gravamen de la renta.
Esta advertencia de Hacienda se produjo en 2018 y levantó cierto revuelo en su momento. Sin embargo, dada la complejidad para controlar esas pequeñas cantidades de dinero que se dan en efectivo y que en bares y restaurantes generalmente gestionan en un bote directamente los propios empleados, el asunto no ha ido a más.
Ahora bien, en el momento en que las propinas se realicen con tarjeta, las cosas podrían cambiar, puesto que ya queda rastro para Hacienda de ese pago.
Sobre el autor:
Beatriz Torija
Beatriz Torija es periodista y documentalista, especializada en información económica. Lleva 20 años contando la actualidad de la economía y los mercados financieros a través de la radio, la televisión y la prensa escrita. Además, cocina y fotografía.