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La usuaria de un gimnasio de Gijón acusada de acosar sexualmente a un monitor de 'fitness' del centro ha reconocido los hechos y ha aceptado este martes una condena de tres meses de prisión.
Así lo ha hecho tras llegar a un acuerdo con la Fiscalía previo a la vista oral prevista para este día en el Juzgado de lo Penal número 1 de Gijón. Se ha interesado por ambas partes que la pena de cárcel quedará en suspenso, condicionada a que no cometa otro delito.
En virtud del mismo acuerdo, la indemnización de 3.000 euros solicitada por la Fiscalía a la acusada en concepto de responsabilidad civil se sustituye por una orden de prohibición de aproximación a menos de 200 metros de la procesada respecto a la víctima, por un periodo de dos años.
Perseguido por las instalaciones
De acuerdo al relato del Ministerio Fiscal, desde el mes de noviembre del año 2018, la acusada era socia de un centro deportivo de Gijón, donde trabajaba el denunciante como monitor de 'fitness' desde el 5 de mayo de 2012.
La acusada le propuso, de manera reiterada, entablar relaciones sentimentales y sexuales, a lo que él se negó. A pesar de ello, la acusada insistía, le perseguía por las instalaciones del centro deportivo y le trasladaba sus pretensiones a otros trabajadores del centro. Por este comportamiento, el gimnasio dio de baja como socia a la acusada.
A pesar de ello, la mujer merodeaba por los alrededores del establecimiento intentando contactar con el monitor, que debía de ocultarse para que no lo abordara. La acusada trató de contactar con él por Internet, sin lograrlo, vía audios, emoticonos de besos, mensajes y vídeos.