Jorge Ballesteros, agente de la Policía Nacional y campeón mundial de tiro práctico (ISPC), ha muerto a los 39 años, tal como ha informado la Real Federación Española de Tiro Olímpico.
El deportista español ha fallecido en el hospital después de ser hallado, aún con vida, en el interior de su coche, aparcado en el madrileño centro comercial de La Vaguada.
Cuando le encontraron en su vehículo presentaba un disparo por arma de fuego en la cabeza, hechos que ahora se investigan. Algunas informaciones apuntan a que dicho disparo podría haberse realizado desde su propia arma.
Campeón mundial 2017 en Open, sumaba también tres Europeos, seis Extreme Europe Open y 17 campeonatos de España. Hace solo mes y medio participó en su última competición, el Campeonato del Mundo en Pattaya, en Tailandia. Ballesteros tenía mujer y dos hijos pequeños.
En sus redes sociales, la Real Federación Española de Tiro Olímpico ha mandado un mensaje de condolencia a los familiares del deportista.
El presidente de la federación, Miguel Francés, ha trasladado su pésame a la familia y ha expresado su "desolación" por la pérdida de "un deportista grandioso", y un "ser humano excepcional". "Siempre nos quedará la luz de su eterna sonrisa", señala.
