Más de la mitad de los fallecidos por incendios en viviendas son mayores de 65 años

Durante el Congreso Internacional de Prevención y Emergencias, celebrado en Málaga, la Asociación Profesional de Técnicos de Bomberos (APTB) y la Fundación MAPFRE han publicado los últimos datos de víctimas mortales por incendio, cifras que se recogen año tras año en el Estudio de Víctimas de Incendios en España, documento de referencia elaborado por estas dos entidades que da a conocer las causas y las consecuencias de los incendios que ocurren en nuestro país.

En lo que se refiere a fallecidos en viviendas, si durante el invierno pasado se produjeron 65 víctimas en toda España, en el de este año se han registrado un total de 70, cinco más que en el invierno pasado, manteniéndose además la tendencia de que más de la mitad de los afectados, un 51% del total, son personas mayores de 65 años. 

Los datos ponen de manifiesto un incremento del 17% en cuanto al número total de personas que han perdido la vida entre noviembre de 2018 y febrero de 2019, con un total de 82 fallecidos, 12 más que durante el mismo periodo del invierno 2017-2018. Llama la atención el repunte de siniestralidad mortal que ha tenido lugar en enero de 2019, que lo convierte en uno de los peores eneros de los últimos cinco años, con 28 víctimas mortales, frente a las 13 que se produjeron en 2018. Andalucía, con 24 fallecidos, Comunidad Valenciana, con 14 fallecidos, y Cataluña, con 10 fallecidos, son las Comunidades con mayor número de víctimas mortales.

Causas y prevención

De las posibles causas conocidas de estos incendios, 18 personas habrían perdido la vida como resultado de un incidente producido por un aparato productor de calor y seis, debido a un cigarrillo mal apagado. Con respecto al lugar donde se originó el incendio, nuevamente destacan el salón y el dormitorio, lugares donde se producen más del 60% de los fuegos. Por otra parte, el 55% de los incidentes se produjeron por la noche.

Las muertes registradas en la temporada actual refuerzan el mensaje sobre la necesidad de promover el uso de detectores de humos como el mejor sistema para alertar de un incendio, especialmente si este se produce por la noche. También se recomiendan  otras medidas de prevención clave en los hogares, como extremar la precaución con estufas y braseros, velas, cableado defectuoso, tomas y enchufes sobrecargados y mantas eléctricas, principales causas de incendio en la vivienda.

En el marco del congreso, Jesús Monclús, director de Prevención y Seguridad Vial de Fundación MAPFRE, ha hecho referencia a la necesidad de desarrollar un plan nacional de prevención de lesiones por incendios “que permita alcanzar el objetivo cero víctimas mortales o graves por esta causa”, una iniciativa, indicó, que se “inspire” en los que ya existen, como los de prevención de lesiones de tráfico, y que tenga en cuenta “medidas básicas y efectivas”, dirigidas a promover la educación infantil, la instalación de detectores de incendios y las inspecciones voluntarias en comunidades y viviendas, entre otras acciones.