Edward Sibley ha sido acusado de un delito grave por abuso a una persona mayor, al dejar a su madre de 81 años en el interior de su coche durante 8 horas seguidas, mientras él se fue a trabajar. Esto ha ocurrido en Nevada, Estados Unidos.
La mujer no tenía teléfono móvil, ni tampoco podía andar, ni conducir, por lo que no podía desplazarse para resguardarse en la sombra del calor extremo, según informa el medio People.
Esto ocurrió el verano pasado, en concreto el 14 de julio, cuando la temperatura en el exterior era de 35,5 grados. La policía informó de que la temperatura corporal de la anciana alcanzó los 41 grados.
No quiso hacer daño a su madre
Las investigaciones han llegado a la conclusión de que Edward no pretendía hacer daño a su madre, y por eso no irá a la cárcel. Ambos dormían habitualmente en el interior del vehículo al ser personas sin hogar.
Además, el hijo dejó a su madre las llaves para que pudieran encender el aire acondicionado, algo que la mujer nunca llegó a hacer.
Edward declaró que a la hora del almuerzo se acercó a ver a su progenitora, y se encontraba perfectamente. Más tarde, dos de sus compañeros llamaron a la ambulancia, al ver como la mujer estaba sofocada en el interior del coche. Murió ese mismo día.
El tribunal ha dictaminado que todo se produjo por una sucesión de "malas decisiones en muy difíciles circunstancias". “Había un caso de indigencia y hubo ciertamente intentos por parte de Sibley de atender a su madre, pero las malas decisiones fueron determinantes ese día”. “No había ninguna prueba o evidencia para probar que tenía intención de causar daño”.
Edward ha terminado por declararse culpable de un delito menor de abuso a una persona mayor, pero no irá a la cárcel, ya que los fiscales han recomendado libertad condicional para el joven.