Thomas Gibson ha muerto tras sufrir una parada cardiaca unas horas antes de que naciera su primera hija. Los hechos han ocurrido en Mánchester (Inglaterra), y tal y como ha contado la familia, el hombre fue encontrado inconsciente por su pareja, embarazada de 39 semanas, que ese mismo día tenía programada la cesárea.
La familia del fallecido ha decidido demandar a los médicos, ya que al parecer el hombre se sometió a unas pruebas, y creen que pudieron haber pasado por alto una anomalía, que podría haberle salvado la vida. Algo que ha confirmado la Fundación del Sistema Nacional de Salud (NHS) de la Universidad de Manchester, que, en declaraciones al Daily Mail, asegura que de haberle colocado un marcapasos, el hombre seguiría vivo.
Tal y como han explicado los familiares, tres semanas antes del fallecimiento, Gibson contrajo un virus estomacal del que aún estaba recuperándose. El medio citado anteriormente asegura que la víctima no pudo ser atendido por su médico de cabecera y tuvo que acudir al Servicio de Urgencias Wythenshawe, donde le realizaron un electrocardiograma. Los resultados de la prueba fueron anormales y se identificó un bloqueo cardíaco completo, que puede provocar muerte cardíaca súbita, pero los médicos no lo detectaron, y dieron el alta al fallecido.
El Tribunal Forense de Stockport ha llevado a cabo una investigación para determinar qué es lo que ha ocurrido. La pareja de la víctima, y madre de su hija en común, asegura que al fallecido no se le diagnosticó ningún problema, a pesar de tenerlo.
Por su parte, la abogada de la familia, Charlotte Moore, ha alegado lo siguiente: "La trágica muerte de Tom es el resultado de una mala interpretación de una prueba de función cardíaca básica, por la cual hemos recibido una admisión total de responsabilidad por parte de la pareja de Tom, Rebecca. i se hubiera interpretado correctamente que el ECG mostraba un bloqueo cardíaco completo, Tom habría recibido un marcapasos y se habría evitado su muerte prematura".
Sobre el autor:
Laura Moro
Laura Moro es graduada en Periodismo y Comunicación Audiovisual por la Universidad Carlos III de Madrid, y está especializada en temas de salud y género. Su trayectoria profesional comenzó en Onda Cero Talavera.