La investigación policial en Tailandia por la muerte y posterior descuartizamiento del cirujano colombiano Edwin Arrieta a comienzos de agosto ha concluido.
Los agentes creen que fue Daniel Sancho, hijo del célebre actor español Rodolfo Sancho, quien supuestamente le habría asesinado premeditadamente.
Para llegar a esta conclusión, la policía se basa en una investigación de algo más de una semana, en las pruebas y testimonios recogidos y en la confesión del propio Sancho.
El encargado de dar a conocer esta noticia ha sido el subinspector Surachate Hakparn, conocido como "Big Joke", y otros funcionarios de la policía.
El policía ha asegurado asimismo que harán llegar estas conclusiones a la Justicia para comenzar con la fase oral y que probablemente se pida la pena de muerte para este caso.
"Fue un asesinato planificado y, por lo general, se pide la pena de muerte para estos casos", ha afirmado, según recogen varios medios de comunicación.