La pareja de Miriam la apuñaló a tan solo un milímetro de la arteria aorta. Un milímetro más habría asegurado una muerte casi inmediata, pero esperó a que se desangrase. Le cortó el cuello y le obligó a tomar 19 píldoras de diazepamida. Pero a pesar de todo, Miriam logró sobrevivir haciéndose la muerta y pudo pedir auxilio arrastrándose por el suelo mientras sujetaba sus propios intestinos que salían de su cuerpo.
Ella era consciente de lo muy celoso que era su pareja, pero nunca antes se había mostrado violento. Sin embargo, el pasado 11 de marzo le dijo que se iría de casa pero antes la mataría y cuando estuvo desprevenida la apuñaló en el pecho con un cuchillo. "Él me dejó claro en ese momento que yo no iba a salir viva de la casa", declara Miriam en el programa Espejo Público de Susanna Griso.
Miriam sobrevivió al apuñalamiento de su pareja haciéndose la muerta: "Me agarré los intestinos y me arrastré para pedir auxilio" ▶https://t.co/locXN3Zpq4 pic.twitter.com/oTdAG3FBO0
— Espejo Público (@EspejoPublico) October 8, 2020
Tras aquella primera puñalada la víctima intentó razonar con su agresor durante cuatro horas mientras "me estaba desangrando y los intestinos se me salían". En un momento de despiste intentó escapar y llegó hasta las escaleras, pero su pareja la alcanzó y volvió a llevarla al piso. Miriam sabía que su hijo iba a llegar pronto del colegio y que su pareja también le mataría, por eso le dijo a su agresor: "Mátame ya para que te puedas ir". Fue entonces cuando cuando "él me degolló".
En aquel momento Miriam tuvo la reacción de hacerse la muerta y su agresor la robó la cartera, las llaves del coche, envolvió su cuerpo en una alfombra, le hizo ingerir las dizepamidas y se marchó. Fue al oír la puerta de la calle cuando la mujer comenzó a arrastrase y pidió auxilio.
Estuvo en coma tres semanas y cuando despertó se encontró en plena pandemia de covid-19 con su con siguiente confinamiento. Ella fue la primera en sorprenderse de continuar con vida. "Por nada del mundo quería morirme", confiesa.
