La Fundación Mutua de Propietarios (@FundacionMdP) ha iniciado el proceso de votación para seleccionar a la iniciativa Más Supervecinos que Nunca 2020, que desea reconocer la mejor práctica de solidaridad y ayuda a las personas con movilidad reducida desarrollada durante el periodo de confinamiento, cuando el aislamiento puso a este colectivo en una situación de vulnerabilidad aún mayor.
Cerca de 30 iniciativas son candidatas a este reconocimiento que forma parte de la campaña #Supervecinos de la Fundación Mutua de Propietarios y que, con una dotación de 3.000 euros, quiere ser un marco de difusión de aquellos proyectos solidarios nacidos durante el estado de alarma que han contribuido a mejorar la vida de las personas con movilidad reducida
“El estado de confinamiento nos obligó a conocer de primera mano la situación que diariamente viven los más de 100.000 españoles que no salen nunca de casa pero, al mismo tiempo, ha mostrado el lado más solidario de personas y asociaciones que se han esforzado por ayudar a quienes tenían problemas de movilidad, especialmente aquellas de edad avanzada o con patologías previas que suponían un factor de riesgo frente al coronavirus”, explica Laura López Demarbre, vicepresidenta de la Fundación Mutua de Propietarios.
Para poder votar a la mejor iniciativa, tan solo hay que entrar en la sección de Votaciones de la web Supervecinos y pinchar en el proyecto que deseas seleccionar. “Queremos dar nuestro más sincero agradecimiento a todos los que nos han hecho llegar estos proyectos que han servido para ayudar, acompañar o entretener a lo más de 2,5 millones de personas con movilidad reducida durante el confinamiento”, afirma López Demarbre.
La campaña ‘Supervecinos’
En 2019, la Fundación Mutua de Propietarios, cuyo objetivo es mejorar la accesibilidad de los edificios y de las viviendas, se propuso dar voz a todas aquellas personas que, debido a las dificultades para salir de casa, se han tornado ‘invisibles’ para sus vecinos.
Partiendo del informe Movilidad reducida y accesibilidad en el edificio, la Fundación Mutua de Propietarios puso en marcha un ‘experimento social’ en una comunidad de vecinos residentes en un inmueble no accesible. Su vecina Andrea –de 71 años, con Parkinson, en silla de ruedas– fue la cara de la campaña. La cruz, las barreras arquitectónicas de su edificio: los cuatro tramos de escaleras que la convierten en prisionera de su propia casa.
El objetivo de la iniciativa ‘Supervecinos’ es hacernos reflexionar. Quizás en nuestro edificio haya algún vecino con movilidad reducida y, quizás, podamos ayudarle. Además, también constituye una petición a las administraciones públicas para que destinen fondos a la adaptación de los inmuebles, y un recordatorio a las comunidades de propietarios de su obligación con las personas con discapacidad o movilidad reducida residentes en la finca.
