5 trucos para mejorar las fotos de comida que subes a Instagram

El verano es una de las épocas del año que más fotografías hacemos. Y la plataforma que utilizamos para publicar nuestras mejores fotografías suele ser Instagram. Y es que cuando estamos de vacaciones, ya sea en nuestra propia ciudad o en alguna escapada que hagamos, nos gusta compartir con nuestros amigos y seguidores fotografías de los sitios que visitamos, de reencuentros con amigos o también de lo que comemos. En este sentido, las fotografías de comida son algunas de las más publicadas y populares de Instagram, ya que son muy visuales y por los colores que suelen tener, llaman mucho la atención.

Por todo ello, hoy os enseñamos unos sencillos trucos que podéis utilizar cuando vayáis a hacer alguna fotografía del plato que os vais a comer y así publicarlo a Instagram de forma más 'profesional'.

Utiliza la cuadrícula de la cámara

Para poder encuadrar mejor nuestra fotografía y hacer que lo importante que queremos destacar (en este caso, un plato de comida) quede en el centro de la fotografía, es recomendable utilizar la cuadrícula de la cámara de nuestro teléfono móvil. Si no la tenéis activada, lo podéis hacer fácilmente desde los ajustes de la cámara. Esto os ayudará a centrar mejor las fotografías y a aseguraros que lo que queréis destacar se encuentra, más o menos, en el centro de la fotografía.

Cuidado con los filtros

Uno de los errores que todos cometemos a la hora de hacer fotografías o editarlas, es aplicar una gran cantidad de filtros. Esto puede funcionar y ser útil en según que casos, pero en otros, puede empeorar la calidad de la fotografía. Y es que una fotografía saturada de filtros queda de todo menos natural. Y en el caso de las fotografías de comida es uno de estos de estos casos. Los platos de comida suelen ser muy vistosos y coloridos, por lo que no es necesario aplicar gran cantidad de fotos porque se perdería la esencia que queremos transmitir. Se recomienda utilizar algún ajuste de color o contraste para retocar un poco la luz de la fotografía, pero poco más. Cuanto más natural, mejor.

Utiliza luz natural y olvídate del flash

Este apartado está directamente relacionado con el anterior. Y es que, aunque en muchas ocasiones el flash del móvil nos puede ser muy útil, en otros casos, como el que aquí comentamos, puede estropear la fotografía y hacer que quede muy artificial. Por lo tanto, siempre que sea posible, la luz natural es nuestra mejor opción y además nos permitirá jugar con las sombras o con diferentes efectos que podemos encontrar de forma natural. Otro truco que podemos aplicar es, si no tenemos luz natural, pedirle a alguna persona que nos ilumine la escena con la linterna del móvil y así prescindir del flash. El efecto no será el mismo que con luz natural, pero nos quedará mejor que con el flash.

Utiliza diferentes ángulos

Normalmente cuando vamos a tomar una fotografía del plato que vamos a comernos, no solemos complicarnos mucho y la lanzamos desde nuestro sitio con el ángulo que podamos conseguir o directamente desde arriba consiguiendo un ángulo cenital. Sin embargo, esto no es muy original, por lo que os aconsejamos innovar un poco y buscar otro ángulo que pueda captar mejor la esencia de lo que os vais a comer para que la persona que mire la fotografía tenga la sensación de poder comerse lo que va a ver. Prueba con acercarte bastante al plato y tomar la fotografía desde una altura inferior para que el plato se vea con mucho más detalle y pueda apreciarse mejor.

Prueba con el modo retrato

Esta opción está cada vez más presente en las cámaras de los teléfonos móviles y se utiliza, como su propio nombre indica, para hacer retratos de personas. Sin embargo, este efecto puede utilizarse con muchas otras cosas. Es muy interesante y puede quedarnos una fotografía muy bonita, ya que la característica de este efecto es que difumina el fondo de la imagen, destacando mucho lo que encontramos en el centro de la fotografía. Como vemos en la fotografía, el objeto que queremos destacar, en este caso los ajos del principio de la imagen aparecen perfectamente enfocados, mientras que los que encontramos en segundo plano, quedan disimulados. Esto potencia mucho más la zona de la fotografía que queremos destacar y le da un toque muy bonito y profesional a la fotografía.