¿Cómo funcionan las apps para familiares de personas mayores que viven en residencias?

Cada vez son más las aplicaciones móviles que se han convertido en útiles herramientas a la hora de controlar aspectos importantes de nuestra salud. Las apps también han llegado a los centros residenciales para adultos mayores, facilitando el contacto entre los familiares y los profesionales que se encargan de su atención, algo especialmente útil cuando existen dificultades para la comunicación directa por cualquier motivo. Saber si tu familiar ha descansado bien o ha tomado su medicación es posible, aunque no puedas desplazarte temporalmente a su residencia.

¿Qué información ofrecen estas aplicaciones?

Son muchos los centros que cuentan con estas aplicaciones móviles, cuyo funcionamiento es sencillo e intuitivo. En ellas queda recogida toda la información referida al residente, para que sus familiares puedan saber en todo momento detalles sobre la medicación, la ingesta de sus comidas diarias o cualquier incidente que haya podido ocurrir.

La mayoría de estas apps funcionan de manera similar y suelen incluir los apartados de alimentación, medicación e informes médicos, resultados de pruebas realizadas (nivel de coagulación en sangre, análisis…) o actividades de ocio, entre otros. También ofrecen información detallada sobre los menús semanales, las salidas previstas y sobre el propio centro, como su funcionamiento e instalaciones. Y no solo eso, algunas incluso te permiten comprobar detalles de carácter administrativo como pagos y facturas, servicios extra, solicitud de ayudas y subvenciones, etc.

También resulta interesante la posibilidad de comunicación, vía mensajería instantánea, con cualquier profesional con el que quieras realizar una consulta, resolver una duda o hacer una sugerencia o queja. No hay duda de que nada puede sustituir el contacto directo con la persona que reside en un centro, pero estas apps informativas proporcionan tranquilidad en el caso de no poder ir a visitarla con asiduidad.

Generalmente, se trata de aplicaciones gratuitas y para acceder a ellas basta con darse de alta con un correo electrónico y estableciendo la correspondiente contraseña, que garantiza que los datos e informes que contiene solo podrán ser consultados por los familiares.