Manuela Martín
Tecnología
¿Con cuántos sensores nos cruzamos en nuestro día a día?
Movimiento, proximidad, temperatura, son algunos de los sensores de móviles, coches o casas
Sensores de movimiento o temperatura son solo dos de los sensores más conocidos. Sin embargo, nuestra sociedad avanza en este sentido a pasos agigantados y ya son multitud de espacios y objetos en los que incluyen sensores de contacto, ópticos, térmicos, de humedad, magnéticos o de infrarrojos, entre otros.
Los sensores son dispositivos que transforman una información procedente del exterior en una respuesta.
La incorporación de sensores en nuestra vida diaria nos ha ayudado en muchos aspectos desde los sanitarios o de transportes, pasando por la seguridad, entre otros.
Sensores en los vehículos
Cabe destacar una de las últimas incorporaciones en los espejos retrovisores de los coches para detectar la proximidad de otro vehículo o los adelantamientos. Una innovación que se suma a los sensores de ultrasonidos incorporados hace ya algo más de tiempo en los exteriores de los coches para facilitar el aparcamiento, o bien el cambio cromático del espejo retrovisor interior cuando se percibe una luz intensa con el objetivo de facilitar y asegurar la conducción.
Estos sensores en los coches se suman al sensor lidar, que detecta formas y genera un mapa 3D del entorno del vehículo en tiempo real o los sensores de imagen o cámara.
Los radares de carretera utilizan sensores de velocidad en los que se recoge la velocidad de los vehículos circulando.
Sensores en los teléfonos móviles
¿Alguna vez te ha costado ver una foto en el móvil porque se gira sin parar? Los teléfonos cuentan con un sensor que detecta si lo estamos mirando en horizontal o en vertical.
Pero no todo acaba aquí. Los teléfonos móviles también cuentan con el lector de huella dactilar o el lector de iris para el desbloqueo, así como con un podómetro para medir el número de pasos que damos cuando estamos caminando.
Además, tienen un sensor de proximidad para saber, por ejemplo, cuándo nos acercamos el móvil a la cara o uno para detectar la luz ambiental y gestionar el brillo de la pantalla.
Hay móviles que incluso incorporan un sensor para controlar el ritmo cardiaco, o sensores de infrarrojos para poder controlar otros dispositivos del hogar como la domótica.
Otros sensores de nuestro día a día
¿Y las puertas de las tiendas? Muchos lugares cuentan con puertas automáticas que se abren con sensores de proximidad que detectan la presencia de objetos o personas sin necesidad de contacto. Este mismo sistema utiliza el sensor de contacto ya que una vez que la puerta está prácticamente abierta el motor detecta que debe cerrarse.
Muchos establecimientos también están utilizando este tipo de sensores de movimiento para controlar el aforo en estos momentos de pandemia, o bien los sensores de humedad para captar señales del ambiente. Estos últimos, los de humedad, también son muy utilizados en jardinería para determinar cuándo las plantas necesitan riego o no, sin duda, una buena forma de buscar la eficiencia energética.
Uno de los sensores que más hemos visto en los últimos meses son los de temperatura. Este tipo de sensor lo encontramos tanto en los termómetros como en termostatos o bien en alarmas de seguridad que funcionan por temperatura.
En el ámbito de las alarmas también se encuentran los sensores de distancia que pueden utilizarse como sensores de presencia o movimiento con infrarrojos.
En lo que a seguridad se refiere también nos encontramos a diario con multitud de sensores de humo o de inundación.
‘Alexa, ¿qué tiempo va a hacer mañana?’ Este tipo de sistemas utiliza sensores de sonido. Se utilizan normalmente para recibir estímulos del exterior en forma de órdenes.
En definitiva, una infinidad de sensores con los que en muchos casos hacer nuestra vida más fácil y segura.