Ignacio Casanueva
Ignacio Casanueva es redactor especializado en temas de tecnología y salud.
… saber más sobre el autorA comienzos de la década pasada las compañías tecnológicas comenzaron a ver un nuevo mercado en el que competir: las wearables. Este término inglés hace referencia a todas aquellas prendas o accesorios del día a día que gracias a la tecnología adquieren nuevas funciones o funciones extra. Por ejemplo: ropa inteligente, pulseras inteligentes y cascos de música con más funciones además de reproducir canciones.
Entre todos estos llamó la atención las gafas inteligentes. Siguiendo el modelo de las gafas corrientes, pero con un diseño más futurístico, las compañías vieron el gran potencial que presentan estos anteojos cuando tienen conexión a internet además de realidad aumentada.
Pero ¿qué pueden hacer estas gafas?
Gracias a la tecnología implantada tanto en la montura (patillas) como el propio cristal las opciones son casi ilimitadas: para el trabajo, para el ocio, en el día a día, etc. Estas son algunas de las formas de utilizarlas:
A pesar de todo el potencial que tienen estas gafas durante los últimos años han caído en barrena debido a la necesidad de avances tecnológicos que permitan hacer la experiencia mucho más real sin molestias para la vista.
Avances como estos son los que nos hacen dar cuenta que el futuro está muy presente.