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Tecnología
Huawei no se rinde y recurre el veto a sus teléfonos móviles en EEUU
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Jueves 5 de diciembre de 2019
ACTUALIZADO : Jueves 5 de diciembre de 2019 a las 12:33 H
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La compañía china presenta un recurso ante la Corte de Apelaciones
Huawei ha presentado un recurso ante la Corte de Apelaciones de Estados Unidos contra la decisión de la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC por sus siglas en inglés) que prohíbe a los operadores en zonas rurales del país recurrir a las subvenciones del Fondo de Servicio Universal (USF, por sus siglas en inglés) para la adquisición de equipos del fabricante chino.
En su apelación, Huawei solicita al tribunal que declare ilegal la orden de la FCC al considerar que no ofrece a Huawei las adecuadas garantías procedimentales al etiquetar a la compañía como una amenaza para la seguridad nacional de Estados Unidos, añadiendo que la autoridad estadounidense tampoco acompaña sus "conclusiones arbitrarias" con evidencias, razonamientos o análisis sólidos, infringiendo la Constitución de los EEUU, la Ley de Procedimiento Administrativo y otra legislación.
"Vetar a una compañía como Huawei, por el mero hecho de provenir de China, no resuelve los desafíos de ciberseguridad", ha afirmado en rueda de prensa Song Liuping, director de Asuntos Legales de Huawei, añadiendo que desde la FCC no se ha presentado ninguna evidencia que demuestre que Huawei constituye una amenaza para la seguridad, mientras que se han ignorado los hechos y objeciones planteadas por Huawei y los operadores rurales.
En este sentido, Song ha defendido que los operadores de telecomunicaciones en zonas rurales estadounidenses eligen trabajar con Huawei porque "respetan la calidad e integridad" de los equipos fabricados por la compañía china.
Por su parte, Glen Nager, asesor principal de Huawei, considera que la decisión adoptada por la FCC excede la "autoridad legal" de esa Comisión, ya que no está acreditada para emitir juicios de seguridad nacional ni a restringir el uso de fondos del USF en función de dichos juicios.
"La designación se basa en un malentendido fundamental de la Ley China y en acusaciones e insinuaciones poco sólidas, poco confiables e inadmisibles. Se trata de un prejuicio vergonzoso", ha añadido.