¿Mala conexión WiFi? Prueba con un repetidor para aumentar la señal

Si hay habitaciones o zonas de tu casa donde tener conexión WiFi parece un auténtico milagro, deberías plantearte adquirir un repetidor. En este artículo te explicamos qué son y qué debes tener en cuenta para comprar el mejor.

Para poder tener buena conexión por toda la casa, una buena opción es añadir un dispositivo para ampliar la cobertura de red WiFi. Existen varias opciones en el mercado según nuestras necesidades.  

Repetidores

Los repetidores WiFi son una opción sencilla y económica. Por tan solo 17€ podemos encontrar buenas opciones en el mercado.

Su funcionamiento consiste en recoger la cobertura WiFi de nuestro router y retransmitirla para que llegue un poco más lejos creando una segunda red.

La mayoría de los repetidores se conectan a la toma de corriente estándar.

Recuerda que el repetidor debe encontrarse bajo el área de cobertura del router, por lo que es posible que tengas que instalar varios si está muy alejado.

Un repetidor es esencialmente dos enrutadores integrados en un solo dispositivo, uno que recoge la señal original y otro al que se envía la señal amplificada.

El repetidor suele crear una nueva red distinta, por lo que deberás incluir en tu dispositivo esa nueva conexión para poder utilizarlo.

Los repetidores también sirven para pasar la señal WiFi a cable Ethernet, permitiendo conectar dispositivos por cable como la Smart TV, ordenadores o decodificadores que no disponen de conectividad WiFi.

Otros sistemas de aumento de señal

Existen otros sistemas similares en el mercado como son:

• Extensor de red WiFi: aunque hay quien lo confunde con el repetidor ya que son prácticamente similares, lo cierto es que el extensor tiene algunas prestaciones mejores ya que son capaces de amplificar la señal y las prestaciones de tu router haciendo que su señal llegue más lejos y con la misma velocidad de conexión que por cable. Este tipo de sistemas suele mostrar 2 o más antenas visibles. Hay modelos inalámbricos de sobremesa. Este tipo de sistema también podemos conectarlo mediante un cable de red al router, para emitir la señal WiFi del router con más potencia. Su coste suele rondar entre los 50 y los 130 euros según la potencia.
• Wi-Fi Bridge: consta de dos dispositivos en el que el primero actúa como emisor WiFi, mientras que el segundo hace las funciones de receptor. El dispositivo emisor se conecta directamente al router mediante un cable Ethernet y se encarga de transmitir una potente señal WiFi codificada, que solo es capaz de descifrar el receptor remoto con el que se sincroniza. Su precio puede alcanzar los 300 euros.
• Power Line Communications (PLC): utiliza los cables de la red eléctrica para transmitir la señal de Internet por toda la casa, de forma que cualquier enchufe puede convertirse en un punto de acceso. Se utiliza un emisor que se conecta al router mediante un cable Ethernet y se conecta a un enchufe. Este dispositivo se encarga de convertir la señal digital de Internet en impulsos eléctricos. En alguna de las habitaciones, se conectará a una toma de corriente un segundo adaptador que se sincroniza con el emisor y se conecta con los dispositivos mediante un cable de red o conexión WiFi. Su precio puede oscilar entre los 70 y los 150 euros.

¿Por qué tengo mala conexión?

El hecho de que no tengamos buena señal WiFi en todas las habitaciones de casa puede deberse a varios factores como son:

• La mala ubicación del router
• La escasa potencia de la antena del router
• La construcción de la casa
• Problemas de pérdida de velocidad o conexión