¿Tu móvil y ordenador se sobrecalientan en verano? Sigue estos consejos para solucionarlo

Aparatos como el ordenador o el móvil son, por lo general, algunos de los que más utilizamos en el día a día, por lo que pueden llegar a sobrecalentarse en algún momento. No siempre sucede en las épocas de más calor, sino que estos aparatos pueden sobrecalentarse en cualquier momento del año, pero las altas temperaturas que caracterizan el verano pueden provocar que estos aparatos se encuentren en temperaturas superiores a las recomendadas. 

Cuando esto ocurre, no solo resulta molesto para quien está usando el aparato, sino que puede provocar daños irreparables en el equipo. Para evitar que esto ocurra, hay algunas medidas que podemos tomar y así proteger nuestros dispositivos de las altas temperaturas. 

Para el teléfono móvil

Hoy en día llevamos el teléfono móvil a todas partes y en todo momento, también en verano, cuando es habitual que pasemos largos momentos al sol soportando altas temperaturas, que pueden resultar perjudiciales también para los aparatos electrónicos, llegando incluso a acortar su vida útil si, por ejemplo, exponemos el móvil al sol durante un tiempo prolongado. 

El sobrecalentamiento del teléfono puede causar problemas como un agotamiento de la batería, que se apague de repente o que colapse, sin poder reiniciarse después. 

Para evitar un sobrecalentamiento, o hacerle frente si ya está sucediendo, desde el blog de tecnología What´s New dan algunos consejos que nos ayudarán a enfriarlo, como retirar la funda, evitando que las rejillas de ventilación se obstruyan y permitiendo que el teléfono se enfríe más rápido. También podemos comprobar las aplicaciones que podamos tener en segundo plano, ya que pueden hacer que el dispositivo trabaje más. 

Bajar el brillo de la pantalla, poner el teléfono en modo avión, evitar cargarlo en ese momento o separar el teléfono de otras tecnologías, puede resultar de igual utilidad, así como actualizar las aplicaciones para mejorar la eficiencia del teléfono y eliminar aquellas que no utilicemos. También podemos dejarlo reposar durante un momento o apagarlo para que descanse y se enfríe. 

Para el ordenador

En el caso del ordenador, sobre todo los portátiles, que suelen sobrecalentarse más que los ordenadores con torre debido a que son más compactos y sus componentes están más apretados, con poco espacio para que corra el aire, dejar descansar el equipo es una de las primeras decisiones que podemos tomar, pues es la más sencilla y de efecto inmediato. 

Su ligereza y pequeño tamaño nos lleva a utilizar el portátil en cualquier lugar, sin embargo, es recomendable colocarlo en superficies planas y duras, en lugar de la cama, el sofá, un cojín o incluso las piernas, así evitaremos tapar los conductos de ventilación, apuntan desde tiendas especializadas. Por otro lado, asegúrate de estos están limpios y de utilizar el ordenador en espacios ventilados y frescos, alejándolos de la luz directa del sol. 

Del mismo modo que con los teléfonos móvil, una forma de evitar su sobrecalentamiento será no usarlo mientras esté cargando, pues la carga de la batería ya supone un factor de calor adicional. También podemos utilizar el modo ahorro, cerrar programas que no utilicemos y que consumen gran cantidad de energía, cambiar la batería si está vieja o, en última instancia, comprar una base de refrigeración que ayude a enfriar el portátil.

Estas medidas evitarán un sobrecalentamiento del ordenado, lo que puede provocar que descienda su rendimiento, así como su vida útil, pero también que el sistema se bloquee de forma inesperada y funcione mucho más lento de lo normal.