Mariola Báez
Tecnología
¿Qué son las cookies? ¿Te están espiando cuando navegas por Internet?
Aparecen en cuanto entramos en una página web, pero ¿que son realmente estas “galletitas”?
Nos hemos acostumbrado a su presencia y vemos normal tener que “aceptar” las cookies cuando queremos permanecer en una página de nuestro interés, pero realmente ¿qué hacen estas intrusas que aparecen en la pantalla de tu ordenador, tablet o dispositivo móvil?
La Oficina de Seguridad del Internauta (@osiseguridad), del Instituto Nacional de Ciberseguridad de España (@INCIBE), lo explica claramente. Las cookies son pequeños archivos que guardan, en el dispositivo de cualquier usuario, la información recogida sobre sus datos de navegación. Páginas que has visitado, idioma en el que lo has hecho, franja horaria, tu dirección de email (si la has facilitado en alguna web)…
En principio, estos archivos, cuya instalación en tu navegador autorizas tú (muchas veces sin leer detenidamente el texto que acompaña al icono de la galleta), no revisten ningún peligro. Su objetivo principal es el de personalizar la propia navegación y, por supuesto, hacer que te llegue la publicidad sobre los productos y servicios que, según los datos registrados, pueden resultarte más interesantes. El problema está en que no todas las cookies tienen fines tan “inocentes”.
Tipos de cookies: ¿puedo deshacerme de ellas?
No hay que confundirlas con ningún tipo de “virus” o intento de ataque informático. Las cookies permiten una navegación rápida y se basan en tus búsquedas anteriores para ofrecerte temas o productos que quizá te interesen. ¿Por qué te salen en pantalla ofertas de vuelos a un determinado destino cuando estás buscando información sobre cualquier otro tema? Porque una cookie ha almacenado tu anterior búsqueda y considera que esa oferta te puede venir bien.
En principio, es una eficaz herramienta publicitaria, sobre todo a la hora de atraer visitantes a una determinada web, pero en ocasiones estas cookies son utilizadas por ciberdelincuentes. Recurrir a ellas para redirigirnos sin que seamos conscientes a una página fraudulenta, para conseguir una máxima distribución de fake news o manipular estos archivos para robar datos de acceso aprovechando algún fallo en la seguridad, son algunos de los posibles problemas que las cookies “descontroladas” pueden causar.
En la mayoría de los casos, se limitan a recabar información. ¿Te espían? Quizás un poco sí. De todas maneras, debes saber que siempre que quieras puedes establecer tu propia política de cookies, configurando tu navegador según tus preferencias y activando las restricciones oportunas. Aunque la mayoría tienen un tiempo limitado de actividad, también en tu navegador encontrarás la opción “Eliminar cookies”, para deshacerte de ellas siempre que lo consideres conveniente.