Scooters para personas mayores con problemas de movilidad: tipos

En la última década se han hecho más visibles en la calle nuevos vehículos sostenibles y fáciles de manejar. Uno de ellos es el scooter eléctrico, que se utiliza para ayudar a personas con problemas de movilidad a moverse por la ciudad. Su tecnología se ha ido adaptando cada vez más a las necesidades de los mayores, para que puedan disfrutar de vidas autónomas. En esta línea, muchas empresas, han recurrido al Internet de las Cosas (IoT) y a la domótica para diseñar hogares y vehículos adaptados, apps para la seguridad y el cuidado de estas personas o para facilitar su bienestar y una vida más activa.

Los scooters de movilidad son una apuesta relativamente nueva que muchos mayores están incorporando a sus vidas. La claves está en que, en comparación con una silla de ruedas, estos vehículos permiten una mayor autonomía y realizar mayores recorridos, o encarar dificultades como las que presentan las calles empinadas. Además, otras ventajas son que incorporan la iluminación con faros LED, espejos retrovisores o bocinas, y permiten una mejor y más segura circulación. Sus actualizaciones en el diseño y la duración de la batería han provocado un aumento en su popularidad y disponibilidad en el mercado.

 

Es recomendable que, al adquirir uno de estos scooters, nos aseguremos de su fiabilidad y calidad. Para ello, nuestro scooter debe disponer de un servicio técnico oficial en España por si se estropea. Además, debemos procurar cuidar de la batería permitiendo que se hagan ciclos de carga completos y utilizándolo, al ser posible, todos los días.

Existen tres grandes grupos de scooters de movilidad, que debemos valorar en función de nuestras necesidades: scooters desmontables con baterías de gel, scooters plegables o desmontables con baterías de litio y scooters robustos de gran autonomía.  El lugar en el que vayamos a guardar este vehículo también jugará un papel muy importante en la hora de decantarnos por uno o por otro. Si nuestra intención es transportarlo en el maletero del coche, lo mejor es decantarse por un modelo desmontable o uno plegable que sea ligero.

Desmontables y plegables

Los scooters desmontables están compuestos de 4 o 5 partes que se pueden montar y desmontar fácilmente y que se pueden cargar por separado. En cambio, los que son plegables adquieren la forma de una maleta tipo trolley y suelen ser más pesados de transportar.

En cuanto a la batería, las podemos encontrar de litio, que son más caras, pero pesan menos que las de gel. Si lo que pretendemos es almacenar nuestro scooter en un lugar fijo como un garaje, podemos optar por scooters que tengan las baterías desmontables. Así, solo tendremos que subir la batería y cargarla.

No desmontables

Otra opción en el mercado son los scooters no desmontables, que presentan una mayor robustez, menores vibraciones y son más resistentes al paso del tiempo. Existen algunas marcas que también permiten desmontar la batería de este tipo de vehículos, por lo que resulta más sencillo su proceso de carga.

 

Si lo que nos interesa no es tanto el tamaño sino las distancias que es capaz de recorrer, debemos fijarnos en los Ah (Amperios/hora) de las baterías. Los Ah nos indican la capacidad de carga de cada batería, lo que dota de autonomía al scooter. Sin embargo, debemos tener en cuenta que a cuanta más velocidad nos desplacemos y mayor sea la inclinación del camino o el peso del ocupante, menos tiempo durará la batería de nuestro scooter.