La pasada sexta ola de coronavirus, caracterizada por un aumento de casos debido a la variante ómicron que coincidieron con las fiestas navideñas, provocó que una gran cantidad de farmacias se quedasen sin existencias de test de antígenos. Desde entonces, la venta de este producto disminuyó significativamente en comparación, sin embargo, con la llegada del verano y los viajes vacacionales a la vuelta de la esquina, unido al aumento de contagios que está disparando de nuevo la incidencia, se ha vuelto a poner el foco en ellos.
La incidencia de coronavirus en mayores de 60 años ha alcanzaba este martes los 1.135 puntos por cada 100.000 habitantes, según los últimos datos del Ministerio de Sanidad. En concreto, ha aumentado 135 puntos respecto al viernes pasado, dejando a dos CCAA, Madrid y La Rioja, superando el 'riesgo alto' de transmisión en mayores, según los indicadores de Sanidad.
Esto ha provocado que la demanda de test de antígenos de autodiagnóstico de la Covid-19 ha repuntado un 119,7% entre el 1 y 4 de julio respecto al mismo periodo del mes anterior, coincidiendo con el avance de las nuevas subvariantes de ómicron, según el análisis flash del observatorio de Tendencias Cofares (@Cofares).
Parte del botiquín habitual
La dispensación sin receta de test de autodiagnóstico en farmacias se aprobó el 20 de julio de 2021 y, desde entonces, se han consolidado como una medida de prevención de cara a evitar nuevos contagios ante el aumento de casos, así como para tener una herramienta de diagnóstico rápida y accesible a través de la red de farmacias.
Ya el pasado mes de abril se registró un aumento mensual del 22,29% en la demanda de test de antígenos, coincidiendo con el fin de la obligatoriedad del uso de mascarillas en interiores. Ahora, Cofares apunta que convergen el aumento de casos de Covid-19 de la séptima ola con el repunte en la demanda de estas herramientas autodiagnósticas que se ha más que duplicado.
Según el informe Tendencias Cofares publicado a raíz de los dos años de pandemia, 9 de cada 10 españoles (93,8%) considera que contar con herramientas de autodiagnóstico, como las pruebas de antígenos, contribuyen a sobrellevar la situación y a tomar el control de la enfermedad. El 40% de los españoles ya tenía claro entonces que los test de autodiagnóstico pasarían a formar parte del botiquín habitual de forma regular, de acuerdo con los datos de Cofares.
Sobre el autor:
María Bonillo
María Bonillo es licenciada en Comunicación Audiovisual y Periodismo por la Universidad Carlos III de Madrid. Escribe principalmente sobre temas de sociedad. También tiene experiencia en comunicación corporativa de empresas como OmnicomPRGroup y Pentación Espectáculos.