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Este veranillo de San Martín, cuya festividad se celebró el 11 de noviembre, será un episodio cálido "inusual" para la época del año y no solo un veranillo otoñal, según espera el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), Rubén del Campo, debido a que varias zonas de la Península, principalmente el norte y el este, tendrán temperaturas máximas y mínimas entre 5ºC y 10ºC superiores a las normales que incluso rondarán o superarán los 30ºC en el Mediterráneo.
Asimismo, del Campo ha señalado que este podría ser "el veranillo de San Martín más cálido de la serie histórica, ya que previsiblemente los días entre el 11 y 15 de noviembre podrían registrarse las jornadas más cálidas para estas fechas en el conjunto de la España peninsular cuando comenzaron los registros en 1950.
Según el portavoz, el episodio comenzó este domingo cuando se alcanzaron temperaturas superiores a 30ºC en puntos de Málaga y valores nocturnos en torno a los 20ºC en zonas del Mediterráneo, es decir, noches cercanas a tropicales.
De este modo, los próximos días predominará el tiempo estable y anticiclónico, aunque con lluvias que se limitarán a puntos del extremo norte peninsular, principalmente en Galicia donde serán abundantes. Mientras tanto, el portavoz ha destacado las nieblas de madrugada y mañana que se formarán en el interior peninsular.
Además, las temperaturas serán "muy altas" para la época durante toda la semana, aunque descenderán entre el jueves y el viernes, cuando volverán a recuperarse de cara al fin de semana. Así, en puntos del Mediterráneo se superarán los 30ºC, al igual que en Canarias, donde se mantendrá un ambiente "muy cálido" hasta el jueves.
El martes continuarán las lluvias en Galicia, nuevamente más abundantes en su mitad occidental, además de que podrían extenderse de forma más débil a puntos del Cantábrico y del norte de Castilla y León. Al mismo tiempo, en el resto del país el clima será estable y anticiclónico, lo que favorecerá la formación de nieblas en zonas del interior, sobre todo en valles del nordeste y sur peninsular según ha explicado del Campo.
Además, las temperaturas subirán en el Mediterráneo ya que ciudades como Alicante o Valencia registrarán hasta 30ºC, al igual que en puntos de la provincia de Málaga, mientras que en Murcia rondarán los 31ºC. En áreas del Cantábrico y la mitad sur peninsular los termómetros marcarán más de 20ºC, y en Canarias habrá oscilaciones de entre 28ºC y 30ºC en las capitales, un ambiente cálido que estará acompañado de calima, y polvo en suspensión.
No obstante, del Campo ha avisado de un descenso térmico en el área Mediterránea y Baleares este miércoles, aunque en el resto de España no habrá cambios y podrían darse ligeros ascensos de temperaturas. Así, las máximas podrían rondar entre los 15ºC y 20ºC en la mitad norte y el centro, y entre 20ºC y 25ºC en el sur y el Mediterráneo.
Por otro lado, el paso del frente todavía se notará en Galicia, con precipitaciones menos abundantes que en los días previos y que se extenderán a otros puntos del Cantábrico de forma débil. Mientras tanto, en el resto de España predominará el tiempo estable por lo que podrían aparecer nuevamente bancos de niebla diurnos en zonas del interior este, como en el centro y la mitad norte peninsular. Con respecto a Canarias, el miércoles habrá un repunte de las temperaturas que podrían superar los 32ºC en el sur de las islas.
Así, durante el jueves y el viernes la AEMET espera que predomine el tiempo anticiclónico nuevamente, aunque Galicia y el Cantábrico seguirán teniendo precipitaciones débiles y volverán a formarse bancos de niebla en el interior, con temperaturas que descenderán, pero que seguirán altas para la época.
Las temperaturas oscilarán entre los 28ºC y 30ºC de máxima en puntos del Mediterráneo, como Valencia o Murcia. Canarias también tendrá un descenso térmico el jueves, pero rondará los 30ºC en puntos de las islas el viernes y durante el fin de semana, ya que tras esa bajada de temperaturas el portavoz ha indicado que no habrá grandes cambios en la Península.
Con todo ello, se espera que las temperaturas se incrementen de forma generalizada de cara el fin de semana, lo que mantendría un tiempo estable y sin precipitaciones.