Hace tiempo que el colectivo sénior dijo 'basta', harto de ser ninguneado, acallado y discriminado. Los mayores forman la cohorte de edad más variada y diversa; cada vez están más organizados y cuentan con altavoces y apoyos tan potentes como 65YMÁS, el consolidado diario de referencia para los asuntos que ocupan y preocupan a los sénior.
Hay muchos retos que abordar aún: Acabar con la lacra de la discriminación en el mercado laboral que genera una terrible paradoja: se retrasa la edad de jubilación al tiempo que el mercado laboral expulsa a trabajadores sénior. Debe ser un objetivo prioritario erradicar toda forma de edadismo, incorporar la perspectiva y la aportación de las personas mayores en el diseño de políticas públicas, tamibén, por ejemplo, a través de un Ministerio de Mayores; aumentar su representación; acabar con la lista de espera de la dependencia, desarrollar el nuevo sistema de cuidados, fomentar y dar recursos a la ayuda a domicilio; impulsar políticas públicas de envejecimiento saludable; acabar con la brecha digital.
Pero los sénior luchan con decisión por lo que les corresonde y esa lucha da sus frutos. El colectivo sénior se ha puesto en marcha y es imparable. La revolución sénior no ha hecho más que empezar.
En los últimos doce meses, este colectivo tan diverso y variado ha seguido alzando su voz y luchando por sus derechos. En 65YMÁS hemos recopilado algunos de los principales logros de los mayores en este último año:
Hace algo más de cinco años y medio, nacía 65YMÁS para dar voz a los sénior. Presidido por Fernando Ónega y dirigido por Ana Bedia, 65YMÁS ya se ha convertido en el medio de referencia del segmento sénior en España. En este 2024, el diario ha cumplido su quinto aniversario con la satisfacción de haber logrado consolidarse con fuerza como el medio de referencia en el segmento sénior en España, con 5 millones de usuarios únicos al mes en España y más de 300.000 suscriptores. Todo con el objetivo de amplificar las demandas del colectivo.
2024 ha sido un año especial para el diario lleno de logros. Como el Ministerio de Mayores, propuesto por Fernando Ónega y que ha recibido ya importantes apoyos, y ha pasado de ser una utopía a una propuesta que ocupa lugar en la agenda política. Fernando Ónega ha declarado en más de una ocasión su intención de dedicarse en cuerpo y alma a "liderar la revolución de los sénior" como presidente del periódico, y lo está logrando. “No exagero cuando cuando pregono que hay un antes y un después de 65YMÁS”, ha dicho.
En 2024 los pensionistas no perdieron poder adquisitivo en sus prestaciones gracias a la aplicación de la fórmula acordada en la reforma de pensiones de 2021 que volvía a ligar la revalorización de las pensiones con la inflación, lo que supone todo un logro para los mayores. El año pasado, más de 10 millones de pensionistas vieron crecer sus nóminas un 3,8%, la segunda mayor revalorización del siglo, después de la subida del 8,5% de 2022, cuando la inflación estaba desbocada.
Pero además, las pensiones de menor importe subieron por encima del resto. Para que las pagas mínimas y las nóminas no contributivas se alejen de la pobreza, subieron un 6,9%. De media, las pensión de jubilación subió el año pasado 52 euros al mes.
Este 2025 las pensiones volverán a subir, algo menos con una inflación ya más controlada. En concreto subirán un 2,8%, las mínimas un 6% y las no contributivas, un 9%.
Como “el inicio de una revolución” calificó en junio el ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, Pablo Bustinduy, el nuevo modelo de cuidados que aprobaba el Consejo de Ministros. Su objetivo: acabar con el modelo de las macroresidencias, incentivar los cuidados en domicilio y mejorar las condiciones laborales y salariales de las trabajadoras en el sector de los cuidados.
La domotización de viviendas, mejora en la accesibilidad y asistencia personal son algunos de los aspectos sobre los que pivotará esta nueva estrategia, que busca “garantizar los recursos necesarios para que las personas permanezcan en su casa, su barrio, su pueblo, el tiempo que deseen, y mejorar las condiciones de trabajo de quienes nos cuidan”. Este nuevo modelo, así, se centra en los entornos comunitarios de proximidad, reforzando la asistencia a domicilio, la teleasistencia y los centros de día.
Apenas un mes después de su aprobación, el gobierno daba luz verde al reparto de 783 millones de euros entre las Comunidades Autónomas para este nuevo modelo. “Para nosotros, la Dependencia es una cuestión de Estado y vamos a destinar todos los recursos posibles que estén en nuestra mano para reforzar el sistema”, declaraba Bustinduy.
En la actualidad, la esperanza de vida para las personas de 65 años supera las dos décadas. Que esos años se disfruten con buena salud depende en gran medida de nuestro estilos de vida y de cómo se aborde la longevidad. Promover una longevidad saludable mínimiza los factores de riesgo que desencadenan las enfermedades crónicas y la dependencia. Además, es clave para reducir la carga sobre los sistemas de salud y atención a largo plazo.
Convencidos de que un envejecimiento activo, además, es esencial para el bienestar general, pues influye en habilidades vitales como el pensamiento crítico, la memoria y la capacidad de adaptación a nuevos desafíos, 65YMÁS ha lanzado en este 2024 una nueva sección dedicada a la longevidad saludable, Cuidate+.
La nueva sección sobre longevidad saludable de 65YMÁS, Cuídate+ bajo el paraguas y el respaldo de prestigiosos especialistas médicos españoles de varias disciplinas, como la Cardiología, la Dermatología, la Psiquiatría o la Traumatología, entre otras más. Este elenco de profesionales de la Medicina forma el Comité Médico de Cuídate+, al que se van a ir sumando más expertos, y va a estar coordinado y presidido por el Dr. José Ramón Calvo.
En España existe una fuerte discriminación por edad en el ámbito laboral, así como una gran carencia de formación y promoción de los sénior dentro de las compañías, además de una preocupante falta de oportunidades de emprendimiento y acceso al mercado laboral en igualdad de condiciones.
Esta es la realidad que constata la Encuesta de Talento Sénior, realizada por 65YMÁS, cuyos resultados se han publicado en este 2024. El 73% de los encuestados por 65YMÁS está convencido y denuncia que las empresas no valoran adecuadamente el talento sénior en el seno de la organización, en el puesto de trabajo y en general en el mercado laboral.
Pese a ello, los sénior son la fuerza que hará bascular el mundo durante las dos próximas décadas en España, caracterizadas por el aumento de la longevidad y la jubilación masiva de la generación del baby boom, la cohorte más numerosa de cuantas se conocen. Los sénior pueden convertirse en un fuerte potencial, si se aprovecha bien por parte de las empresas y de la sociedad.
Convencidos de ello, y tras el rotundo éxito cosechado por la campaña ‘Aprender de la experiencia’, 65YMÁS y la Cámara de Comercio de España se han vuelto a unir para poner en marcha un ambicioso proyecto. La necesidad de apoyar el talento sénior sin fisuras es uno de los mensajes clave y la reivindicación unánime de la campaña ‘El Valor Sénior’, cuyo objetivo es poner en valor el talento sénior y el fomento del empleo y el emprendimiento entre los mayores de 45 años. Para ello, 65YMÁS y Cámara España han realizado diferentes actos por todo el país a lo largo del 2024, con dos objetivos: crear conciencia del desperdicio del talento que supone marginar a los mayores de 45 años y mostrar a las personas desempleadas las herramientas y oportunidades que tienen para su reinserción laboral.
La imagen de una persona mayor que supone un coste para la sociedad, que necesita apoyo de su familia, de su entorno y del Estado, que es perceptor de ayudas, que mata las horas mirando obras y que colapsa las salas de espera de los centros de salud es un estereotipo incierto y, por fortuna, aunque hay mucho edadismo en nuestra sociedad, esta imagen poco a poco, se va convirtiendo en cosa del pasado.
La realidad es bien distinta y los datos demuestran que se trata del colectivo que más aporta a la sociedad: suponen el 25% del PIB, el 60% del gasto total, más de cinco millones trabajan (un 4,6% más que en 2023 y un 63% más que en 2014) y el 28% de los autónomos tienen más de 55 años, casi un millón, siendo muchos de ellos creadores de empleo y emprendedores. “La generación sénior sigue siendo un pilar fundamental de la economía familiar”, aseguraba recientemente Juan Fernández Palacios, director del Centro de Investigación Ageingnomics de Fundación Mapfre, durante la presentación del V Barómetro del Consumidor Sénior. Prácticamente la mitad ahorra todos los meses, el 58% considera que su situación financiera es buena y el 73% piensa que se va a mantener en el tiempo. Además, la mayoría ayuda económicamente a su entorno cercano (un 51 %) y le dedican tiempo con frecuencia
Los sénior tienen poder adquisitivo, cada vez gozan de una mejor salud y están cambiando las formas de consumo. Las empresas, las organizaciones y las administraciones pronto no tardarán en cambiar su foco para centrarse en ellos. De hecho, ya están surgiendo nuevos productos y servicios en el mercado especialmente diseñados para adultos mayores.
Hace poco, analizábamos la publicidad de esta Navidad para concluir que hay menos presencia de mayores en la mayoría de los grandes anuncios de las marcas, pero en los que aparecen, están mejor representados en relación con su imagen real. Es decir, este año las marcas han recurrido mucho menos a una fórmula infalible y recurrente hasta ahora para sus anuncios navideños: el estereotipo del abuelo.
Más allá de la Navidad, algo está cambiando. La ausencia de mayores en la publicidad, salvo para lanzar una imagen distorsionada y estigmatízate ha sido la tónica habitual. Y, aunque aún hay mucho por hacer, el mensaje de 65YMÁS de cambiar la mirada hacia el colectivo de los mayores y combatir los estereotipos edadistas, van calando poco a poco.
Ver a Ángela Molina luciendo canas en una campaña de Zara; que LÓreal cree una cátedra junto a la Universidad Nebrija para impulsar la investigación en torno a la generación silver y que lance campañas de belleza a partir de los 50; o que triunfen modelos sénior como Merel Krielaart, Andrés García Carro o Pino Montesdeoca, es un importante avance.
El grado de insatisfacción de los sénior con sus entidades financieras sigue siendo elevado, dos años después de que los mayores se plantaran frente a la banca por un trato más humano y contra la exclusión financiera. Un 46% asegura sentirse insatisfechos o muy insatisfechos con el servicio y el trato recibido por sus bancos. Esta es una de las principales conclusiones que se desprenden del segundo Estudio ‘Los mayores y la banca’ realizado en este 2024 por 65YMÁS sobre el grado de satisfacción de los clientes sénior con el sector bancario. Pese a que casi la mitad de los sénior están descontentos con la atención que reciben, el grado de insatisfacción ha descendido 24 puntos porcentuales respecto a hace dos años.
Los mayores perciben positivamente las medidas aplicadas por la banca para mejorar la atención, como la ampliación del horario o el trato preferente. De hecho, esas medidas, orientadas a quienes tienen 65 años o más, han logrado que el descontento se traslade hacia los sénior que aún no han cumplido esa edad. El mayor porcentaje de insatisfechos con su banco se encuentra en la franja de edad de los 55 a los 64 años.
En 2024, cristalizó otra batalla ganada de los mayores a la banca: el fin de las comisiones por retirar dinero en ventanilla. Unas comisiones que afectaban de forma especial a los mas mayores que desde primeros de año quedaron prohibidas.
65YMÁS fue el primer medio en denunciar y abordar una de las comisiones que más ha perjudicado –e indignado- a las personas mayores: la comisión por retirar dinero en ventanilla. Después de ser instadas por la Ministra de Economía, las patronales bancarias aseguraban en que ya se habían retirado. Junto a asociaciones de mayores, consumidores y el propio Carlos San Juan, 65YMÁS siguió denunciando que aún había entidades que las cobraban. Un trabajo de denuncia y seguimiento que culminó con la prohibición por ley de dichas comisiones para los mayores.
En febrero del año pasado, el talento sénior triunfó en la 38 edición de los Premios Goya tanto como ‘La sociedad de la nieve’, de José Antonio Baiona, que se alzó con 12 cabezones. Ana Belén (72 años), como presentadora de la gala junto a Los Javis; Sigourney Weaver (74), por su Goya Internacional; José Coronado (66), Goya al Mejor Actor de Reparto por 'Cerrar los Ojos'; Ane Gabarain (60), Goya a Mejor Actriz de Reparto por '20.000 especies de abejas'; José Sacristán (86) y el director de fotografía Juan Mariné (103), Goya de Honor 2024, brillaron en los Premios Goya 2024 celebrados en Valladolid.
Además, la enfermedad de Alzheimer estuvo presente en los Goya 2024 a través de dos cintas: ’Mientras seas tú, el aquí y ahora de Carme Elias', de Claudia Pinto Emperador e Iván Martínez-Rufat, (Premio a la Mejor Película Documental), y con la chilena 'La memoria infinita', (mejor cinta iberoamericana).
Sin embargo, en la 96ª edición de los premios Oscar, celebrada el pasado mes de marzo, el talento sénior también brilló, pero en su ausencia.
Solo una estatuilla fue a manos de un actor sénior, Robert Downey Jr, por su papel del político Lewis Strauss en Oppenheimer. De los 20 actores y actrices nominados en las categorías de reparto y protagonista, solo 7 de ellos tenían más de 55 años: Paul Giamatti (56), Jeffrey Wright (58), Jodie Foster (61), Robert Downey Jr (58), Mark Ruffalo (56) y, solo dos con 65 o más años: Robert de Niro (80) y Annette Bening (65).
En literatura, cabe destacar a la escritora Paloma Sánchez-Garnica (Madrid, 62 años) que este año se alzó con el premio Planeta con su obra Victoria; y la surcoreana Han Kang, de 54 años, ganadora del Premio Nobel de Literatura en 2024.
En España hay más de nueve millones de personas mayores, un 20% de la población, cifra que se duplicará en 2050. Los sénior son una parte tan importante de la sociedad, que su voto ya resulta decisivo.
Lo vimos en las últimas elecciones generales del 23J, pero este 2024 lo hemos vuelto a ver en las elecciones gallegas, vascas y catalanas, así como en las elecciones al Parlamento Europeo. En estos comicios, los votantes de más de 65 años han sido los mayores, en número, de la historia democrática de España. Representan casi el 25% del electorado.
El papel de las instituciones de la Unión Europea es determinante en lo que a políticas relacionadas con los mayores se refiere. Todo pasa por Europa y, si no, se nutre parcial o totalmente de fondos europeos. El cambio del modelo de cuidados de larga duración, la validación de la reforma del sistema de pensiones, la política monetaria, que tanto afecta al bolsillo de todos los ciudadanos; las medidas que tienen que ver con la transformación digital; una parte de la regulación sanitaria; la financiación parcial de políticas contra el desempleo (subsidios, formación, etc); e incluso la modificación o eliminación de las franjas de edad para renovar el carné de conducir.
